EL AGROTURISMO Y LA TERCERA EDAD

El cambio.

El agroturismo, como ya hemos comentado en otros escritos, es más que todo el producto de la maduración intelectual del productor agropecuario que reduce, por la edad, su radio de acción en su granja y quiere mostrar al mundo ese fruto del esfuerzo individual que le dio la juventud recién pasada. En otros casos el agroturismo representa parte del reciclaje de profesionales de muchas especialidades que encuentran en la agricultura un motivo desestresante de continuar trabajando en labores diferentes, aparentemente sencillas, pero dotadas de complejidades técnicas y tecnológicas que son resueltas con entusiasmo y deseos de servir a otras personas.

En ambos casos se trata de personas que sobrepasan lo 40 años. Solo basta mirar las fotos del seminario de inducción al Agroturismo que promovió el MIDA hace pocos días, para verificar que casi todos los participantes son personas maduras.

Productores de la tercera edad.

Ahora bien, esta situación no es rara en Panamá debido a que la propia agricultura en general está conformada y liderizada por personas de la tercera edad. Y esto se debe a que la juventud ha estado saliendo del campo por recomendaciones de los propios padres

que consideran que sus hijos les irían mejor dedicándose a otras profesiones que al cultivo de la tierra. La globalización de la economía ha contribuido mucho a que la mano de obra campesina salga del campo a buscar otras oportunidades en las ciudades donde el comercio paga mejor que un productor y tiene que “joderse menos”. Esta salida de la juventud está dejando a los mayores en el campo y en muchos casos le exigen a sus padres la venta de las propiedades para dedicarse a otros negocios.

No obstante, lo anterior, también está ocurriendo que muchos profesionales panameños y extranjeros están adquiriendo fincas en el interior del país para dedicarse a la agricultura y a la ganadería. Son muchos los que han recomprado las propiedades de sus padres para crear proyectos nuevos y más productivos.

Este fenómeno que hoy apreciamos en Panamá ocurrió en Francia, Italia, España, Taiwán, Brasil, chile, Argentina, Colombia, Costa Rica, y otros países hace más de 30 años. En España, por ejemplo, muchos europeos compraron pequeñas granjas que luego transformaron en atractivos turísticos para sus propios coterráneos. Este modelo atrajo a muchas personas a apreciar otro tipo de turismo, muy diferente al turismo masivo de sol y playa.

Apoyo del MIDA y ATP

El agroturismo en Panamá es incipiente, pero en los últimos dos años está siendo apoyado tanto por ATP como por el MIDA, aunque se requiere mas asistencia, sobretodo, financiera para que el desarrollo de este negocio sea mas atractivo.

Aquí debemos reconocer que todos los que administramos Granjas Agroturisticas, desde el punto de vista personal no somos sujetos de crédito por que somos de la tercera edad y los Banco no le prestan a los viejos, a menos que sea por descuento directo del sueldo de jubilado.

Asimismo, hay que reconocer que es la gente de la Tercera Edad la que está regresando al campo y creando nuevas oportunidades con nuevas profesiones (chef de cocina típica, guías de turismo ecológico, botánicos, artesanos, folcloristas, etc.) para que la juventud se quede en el campo. Este es el papel social que hoy está jugando el agroturismo en Panamá, por eso es muy importante apoyarlo buscando mecanismo modernos de financiamiento y creando incentivos en los Bancos para que ayuden financieramente a estos proyectos.

Productores modernos en espera de recibir la certificación de sus granjas de manos del Ministro Víctor Pérez Batista.